Las empresas son cada día más conscientes de la importancia que tiene poder contar con un proveedor logístico de calidad. Pero no siempre resulta sencillo encontrar a uno que cumpla este requisito y que además encaje con las necesidades de la compañía. Pero para que esta búsqueda pueda ser más sencilla, como operadores logísticos os proponemos un listado de virtudes que son habituales entre las mejores empresas de transporte.

Así quedará en tu mano evaluar si tu actual socio logístico está cumpliendo con ellas.

 

Virtudes de las mejores empresas de transporte

Innovación, y no solo tecnológica

Una señal poco halagüeña será percibir que tu proveedor parece estar anticuado. Sin embargo, es importante no valorar la innovación solo por el aspecto más puramente tecnológica. Si tu proveedor logístico innova también lo notarás en la forma de abordar tus necesidades: detectar nuevas soluciones, encontrar nuevas rutas, diseñar procesos más eficientes. A menudo los mayores cambios vienen de pequeños detalles o modificaciones que marcan la diferencia.

 

Personalización

En la personalización es, precisamente, en el lugar en el que estas pequeñas diferencias suelen brillar. Las pequeñas personalizaciones -y ser capaces de introducirlas en los procesos estandarizados sin que estos se resientan- hacen que muchos clientes encuentren la solución justa que hasta ahora no habían logrado con otras empresas de transporte.

 

Estabilidad

En pocos sectores es más cierto que en la logística el dicho de que la falta de noticias son buenas noticias. No son pocas las empresas que afirman que su ideal es poder olvidarse por completo de la parte logística. Para ello, las mejores empresas de transporte desarrollan servicios sólidos y estables: plazos de entrega estandarizados -sin zonas que sean puntos negros-, redes de distribución con delegaciones solventes, etc.

 

Las mejores empresas de transprote te ayudan en los peores momentos

En esta búsqueda de la estabilidad también está presente la forma de afrontar la estacionalidad. Es decir, esas épocas del año en las que hay grandes altibajos en la cantidad de mercancía que se distribuye. Para una compañía que quiera llevar toda su logística podría ser muy problemático tanto la desocupación de personas y maquinaria en las épocas bajas como el exceso de volumen en los picos más altos. Los operadores logísticos están habituados a lidiar con estos casos, además de contar con otros clientes -con picos estacionales distintos- que pueden ayudar a paliar este efecto.

Esta cualidad también repercute en la escalabilidad, de forma que las mejores empresas de transporte son capaces de asumir con naturalidad el posible crecimiento de sus clientes, aunque estos sean fuertes.

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